- Es urgente revisar a fondo y reformar el sistema penitenciario del país
- Es inadmisible que los delincuentes sigan operando desde las cárceles
Desde la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), condenamos la violencia suscitada el domingo 1.° de enero en el penal estatal, CERESO No. 3, de Ciudad Juárez que dejó como saldo preliminar la muerte de 17 personas, más de 20 lesionados de gravedad y la fuga de 30 reos de alta peligrosidad, entre ellos, Ernesto Alfredo Piñón de la Cruz, alias “El Neto”.
Nos solidarizamos con los familiares de los reclusos y custodios fallecidos y con los ciudadanos que fueron víctimas del robo de sus vehículos y padecieron nuevamente, tal como sucedió el 11 agosto de 2022 en el llamado “Jueves Negro”, un ambiente de máxima inseguridad debido a los actos perpetrados por los delincuentes para infundir terror entre la población.
En ese sentido, reiteramos nuestra petición a los tres niveles de gobierno para que más allá de las diferencias, exista una estrecha coordinación entre las autoridades municipales, estatales y federales y las distintas corporaciones policiacas para que cumplan con su obligación Constitucional de brindar seguridad a la población con base en una estrategia integral contra la inseguridad.
En Coparmex consideramos urgente que, ante la creciente violencia suscitada en México y en los centros de readaptación social, los tres niveles de gobierno revisen a fondo la operación del sistema penitenciario del país para realizar las reformas necesarias que garanticen el respeto a los derechos humanos e impidan que los delincuentes continúen operando desde las cárceles, generando terror entre la población interna y la ciudadanía.
Si queremos que los índices delictivos en el país desciendan, se debe asumir el control absoluto de las cárceles, entre otros factores. Es primordial que exista una comunicación y vinculación efectiva entre la Federación, los Estados y los Municipios para que procedimientos como el traslado de reos de alta peligrosidad a penales federales, se concrete y se eviten situaciones como la ocurrida en año nuevo en Ciudad Juárez.
Es importante que, en el diseño e integración de una estrategia integral y efectiva contra la inseguridad y la impunidad, los gobiernos se abran a la participación ciudadana que ha permitido en varias ciudades del país la implementación de acciones locales y regionales exitosas en materia de prevención del delito. Ciudad Juárez había sido un ejemplo de participación ciudadana y es necesario retomarla y fortalecerla.
En Coparmex estamos convencidos que la lucha contra la violencia, la inseguridad, la impunidad y la corrupción que afectan la convivencia social, la inversión y frenan el desarrollo del país, es una tarea que, si bien debe asumir con responsabilidad la autoridad, se requiere también de la participación comprometida de los ciudadanos para que vivamos en un México más seguro y en paz.