El director de Coparmex Nuevo León aseguró que urge la aplicación de apoyos para recuperar esos millones de micronegocios que quizá representaban la principal fuente de ingresos para sus familias.
por Lourdes Flores de El Economista
Monterrey, NL. Un análisis de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) Nuevo León, con datos de la Encuesta Telefónica de Ocupación y Empleo (Etoe), del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), indica que 2.6 millones de mujeres que trabajaban por cuenta propia en el país, dejaron de hacerlo por el confinamiento provocado por el Covid-19, y por el nulo apoyo del gobierno federal a sus negocios.
En Nuevo León, hasta el primer trimestre de este año había 160,677 mujeres que trabajan por cuenta propia, sin embargo, no se conoce la evolución de esa cifra debido a que la Encuesta es de orden nacional.
En términos absolutos, mientras que en 2019 había en México 5.1 millones de mujeres trabajando en negocios propios, ese número ahora se redujo a 2.5 millones.
Iván Rivas Rodríguez, director de Coparmex Nuevo León, aseguró que urge la aplicación de apoyos a micro negocios, para recuperar esos millones de negocios que probablemente representaban la principal fuente de ingresos para la familia de estas mujeres.
“Seguimos sin comprender la postura del gobierno federal, de la rigidez y dureza que muestra hacia la actividad productiva. Hemos planteado propuestas como las de Remedios Solidarios que ayudarían en mucho a la reactivación de los negocios”, añadió.
Urgen apoyos de parte del sector público federal, para aliviar la falta de liquidez que seguramente muchos de esos negocios padecen actualmente, y que necesitan para volver a emprender sus negocios, insistió.
Las Población Económicamente Activa (PEA) femenina a mayo pasado fue de 17.9 millones, quienes representan un 35.3% del total del país.
En México, del total de la población ocupada, hombres y mujeres, a mayo pasado, 19% son trabajadores por cuenta propia, ese porcentaje es inferior en 3.8 puntos a los que había en el mismo período de 2019.
Rivas Rodríguez agregó que es necesario que el gobierno federal considere que los apoyos a las empresas significan una inversión, porque redundan en empleos y generación de riqueza para el país, y no un gasto.
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