De acuerdo con datos de la Coparmex Nacional, México sufrió 344,526 bajas durante el mes de mayo.
por Lourdes Flores de El Economista
Monterrey, NL.- La entidad es uno de los ocho estados cuyas bajas netas de empleos permanentes en mayo representaron más de 90% del total de puestos de trabajo que se han perdido, debido a la pandemia de Covid-19, indica un análisis que realizó la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) Nuevo León.
Ese porcentaje empeoró respecto al mes de abril, cuando la pérdida de empleos formales de tipo permanente significó 80% del total –permanentes y eventuales– dados de baja.
En total, durante los meses de marzo, abril y mayo el estado sumó una pérdida de puestos de trabajo permanentes de 72,214 plazas.
Ambos porcentajes de abril y mayo, superan a los registrados a nivel nacional, los cuales fueron de 66 y 74% respectivamente.
Los estados con mayores pérdidas de empleo permanente en el país fueron: Nayarit, Chihuahua, Baja California, Ciudad de México, Coahuila, Guanajuato, Zacatecas, Durango y Nuevo León.
Con excepción de Nayarit y Durango, el resto de los estados se distinguen por su alta concentración de empleo manufacturero con vocación exportadora.
Iván Rivas Rodríguez, director de Coparmex Nuevo León, explicó que el sector empresarial ha hecho su mayor esfuerzo por conservar a sus trabajadores, sin embargo, la parálisis de la actividad productiva por dos meses y la falta de apoyos públicos, complican la liquidez de las organizaciones.
“Por eso hemos insistido en que el gobierno federal puede ayudarnos a que el problema de desempleo no empeore más, a través el salario solidario, seguro solidario y del bono solidario”, añadió.
En este sentido, hace unos días, el presidente nacional de Coparmex, Gustavo de Hoyos Walther, comentó que en las políticas públicas se debe buscar impulsar el salario solidario y el seguro solidario equivalente a un salario mínimo general por seis meses a aquellas personas que perdieron su trabajo.
Así como el bono solidario que es un incentivo para la contratación de empleo formal con el fin de recuperar la pérdida de empleo registrada en los últimos meses. Consiste en una contribución del gobierno equivalente a una proporción del salario del trabajador contratado por un periodo de tres meses.
En mayo, México sufrió la pérdida de -344,526 puestos de trabajo formal, respecto al mes anterior, siendo los sectores de los servicios y la industria de la transformación los que peores bajas de trabajadores formales registraron en el IMSS.
En Nuevo León, la pérdida de puestos de trabajo formales durante mayo fue de -27,441. La industria de la transformación fue la que padeció la mayor pérdida de empleo seguida por el sector de los servicios.
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