Comunicado de prensa
Reafirmamos que, para poder encontrar una solución de fondo a la situación actual del sistema de transporte urbano, es vital que el tema se aborde y analice de manera objetiva y únicamente con una visión técnica.
Somos conscientes del problema que enfrentan muchos empresarios del transporte urbano después de casi cinco años sin aumento de tarifas. Sin embargo, votar a favor de un aumento sin condicionarlo a obtener mejores beneficios para los usuarios y sin considerar todos los elementos adicionales y necesarios para mejorar el sistema de transporte, sólo sería una solución menor, con muy poco efecto y duración.
Votar en contra de un aumento a las tarifas en plena conciencia de la situación actual del sistema de transporte, también resultaría irresponsable. Además, estamos seguros de que eso nos encaminaría a un escenario en el que el estado busca convertirse en empresario del transporte, y que bajo ninguna óptica apuntaría a una mejora integral ni a una solución de fondo.
Estamos entonces ante un dilema de dos opciones de solución que verdaderamente no lo son.
Por lo anterior, en este ambiente claramente político, la decisión más congruente que nos queda es la abstención, pues ninguna de las opciones planteadas apunta siquiera a una solución de fondo.
Consideramos que se deben reestablecer las condiciones para el diálogo y para la gobernanza del sistema como primer paso. Sin garantías claras, avanzamos de manera irremediable hacia una crisis aún más profunda.
Recordamos que, como iniciativa privada hemos solicitado ya el cumplimiento de los parámetros requeridos para contar con un sistema de Transporte Público Urbano a la altura de nuestra ciudad metropolitana, que privilegie en todo momento a los usuarios.