Ciudad de México.– La respuesta de México a la reforma fiscal de Estados Unidos debe atender en dos frentes, cuidar y hacer sustentables las finanzas públicas y dotar de competitividad al sistema tributario, señala la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex).
“Los empresarios coincidimos en la importancia mantener la disciplina fiscal en nuestras finanzas públicas, pero sí acompañando dicha disciplina con un mejor ejercicio del gasto público, seguimos teniendo como reto pendiente mejorar la calidad en el ejercicio del gasto público”, dijo Gustavo de Hoyos Walther, presidente de la confederación.
Según el sindicato patronal debe haber una reforma a fondo en donde se considere la deducción plena de las prestaciones laborales; la reducción gradual del impuesto corporativo sobre la renta; implementar un esquema de deducción inmediata y dar mayor seguridad jurídica a los contribuyentes.
También incluye la solicitud de que la retención del Impuesto Sobre la Renta (ISR), sea del 10 por ciento por pago de dividendos a personas físicas, sea acreditable contra el impuesto del ejercicio, en lugar de definitiva como es actualmente y se facilite el cumplimiento de las obligaciones fiscales, mediante un proceso continuo de simplificación.
“Para México resulta indispensable decidirnos a iniciar el análisis de las alternativas que tenemos para hacer a nuestro sistema tributario competitivo a nivel internacional”, señaló.
Explicó que a pesar del desempeño positivo en la recaudación que ha mostrado el país, el nivel de endeudamiento mantuvo hasta 2016 un ritmo de crecimiento acelerado, todo ello por un aumento en el gasto público.
“En 2009 había un 36.2 por ciento del PIB de Saldo Histórico de Requerimientos Financieros del Sector Público y al cierre del 2016 aumentó a 50.5 por ciento del PIB”, dijo.